Feeds:
Entradas
Comentarios

Posts Tagged ‘Mujeres’

Este post lo escribí para leerlo en un evento del Club de Lecturas Feministas de Usera, enmarcado dentro del #MarzoFeminista2022. El mes anterior habíamos comentado Una Habitación propia y decidí seguir reflexionando sobre ello.

Habla Virginia Woolf de la pobreza de nuestro sexo. De forma retorica, se pregunta qué habían hecho nuestras madres para no tener bienes que dejar a sus hijas. Tal vez, dice, habían vivido una vida de derroche y de esparcimiento. Poniendo como ejemplo a la madre de su amiga Mary, concluía que difícilmente podía haber llevado una vida disipada teniendo que criar a trece hijos.

Ha pasado casi un siglo desde que Woolf reflexionara sobre la situación de las mujeres.  Hoy tenemos derechos que en aquel entonces eran impensables, tenemos formación, trabajo remunerado, podemos legar bienes materiales a nuestras hijas, pero…, me aventuro a emularla y me pregunto qué echarán en falta, qué desearían recibir en herencia, además de bienes materiales.

Virginia Woolf

¿Por qué son pobres las mujeres?, se pregunta Virginia Woolf. Vuelvo a imitar a la autora y encabezo una página escribiendo en letras mayúsculas LAS MUJERES Y LA POBREZA y veo a que me lleva…

Cuidados…, trabajo no remunerado…, afecto…, cuidado de hijas e hijos…, activismo…, colaboración…, cuidados…, amor…, capacidad de…, cuidar…, estereotipos…, tareas domesticas…, trabajos feminizados.., cuidados…

En la lista que me apareció al reflexionar imitando a Woolf, el término cuidados se repite una y otra vez, por lo que me paro a pensar si será esta la causa principal de que las mujeres vivamos situaciones de pobreza y desigualdad en mayor medida que los hombres. Dado que nadie con capacidad de raciocinio defendería hoy que las mujeres son inferiores a los hombres, dado que las mujeres actualmente tienen una formación similar a la de los varones, dado que han demostrado que ejercen todo tipo de profesiones con igual eficacia que los hombres… ¿por qué en el siglo XXI siguen siendo pobres? ¿Por qué siguen siendo ellas quienes en mayor medida se ocupan del cuidado de la familia, de hijas e hijos y de las personas mayores? ¿Por qué el trabajo reproductivo sigue siendo cosa de mujeres?

Responder y profundizar sobre estas preguntas requiere tiempo, por ello remito a otros textos. Sigo leyendo a Virginia Woolf que dice: Casi sin excepción se describe a la mujer  desde el punto de vista de su relación con los hombres…y esta es una parte tan pequeña de la vida de una mujer… Esta idea me lleva de nuevo a pensar cómo se describe actualmente a las mujeres, si se las sigue ensalzando al tiempo que se las menosprecia y se les limitan derechos.

Tenemos que reconocer que lo que denunciaba Woolf hace tanto tiempo sigue siendo una realidad, se habla de las mujeres como esposas de, madres,  hijas, abuelas…, por poner un ejemplo, se alaba la maternidad pero se penaliza a las mujeres por ser madres, o por el mero hecho de que puedan serlo. Remito de nuevo a otros escritos sobre el tema para no extenderme demasiado.  

Como he señalado antes, desde que Virginia Woolf (1929) escribiera Una habitación propia, las mujeres hemos conseguido avanzar en derechos, en oportunidades, pero aún  queda mucho por hacer y, lo que es peor, el peligro de retroceder es real. Ya lo advirtió Simone de Beauvoir: No olvidéis jamás que bastará una crisis política, económica o religiosa para que los derechos de las mujeres vuelvan a ser cuestionados. Estos derechos nunca se dan por adquiridos, debéis permanecer vigilantes toda vuestra vida.

En estos momentos vemos que  la derecha y la ultraderecha pretenden que los derechos logrados con el esfuerzo y el sacrificio de muchas mujeres desaparezcan. La palabra feminismo les molesta, pretenden ignorar que la violencia machista es una realidad en nuestra sociedad y quieren erradicar las políticas públicas que tan necesarias son.

La indignación que siento al escuchar a algunas/os dirigentes políticos, me lleva a pensar que si Virginia Woolf escribiera ahora seguiría denunciando que vivimos en una sociedad en la que los hombres siguen detentando el poder.

Finalizo preguntándome qué podemos hacer las mujeres para cambiar los roles y estereotipos que tanto nos condicionan, cómo podemos evitar las discriminaciones que sufrimos las mujeres,  la violencia machista y las agresiones sexuales, que entiendo son la consecuencia de la desigualdad estructural que vivimos.

Como feministas, ¿qué podemos las mujeres hoy legar a nuestras hijas? Antes de eso: ¿Qué significa ser feminista?

Otro día reflexionaré sobre ello.

Read Full Post »

Sororidad

sororidadDice Marcela Lagarde (2012)[1]: La sororidad es la alianza feminista entre las mujeres. Es una dimensión ética, política y práctica del feminismo contemporáneo. Es una experiencia subjetiva de las mujeres que conduce a la búsqueda de relaciones positivas y a la alianza existencial y política cuerpo a cuerpo, subjetividad a subjetividad con otras mujeres, para contribuir a la eliminación social de todas las formas de opresión y al apoyo mutuo para lograr el poderío genérico de todas y el empoderamiento vital de cada mujer.

Sin duda todas las mujeres feministas somos conscientes de la situación de opresión que la sociedad nos ha impuesto, sabemos que el sistema patriarcal nos oprime y que intenta que nos enfrentemos para quitarnos el poder que tendríamos si uniéramos nuestras fuerzas contra   las imposiciones del patriarcado, cuyo fin es que sigamos sometidas al poder masculino. Si fuéramos capaces de aplicar la sororidad como la define Lagarde, desmontaríamos el sistema patriarcal.

La división sexual del trabajo, al atribuir a las mujeres unas habilidades, tareas y competencias relacionadas con la reproducción y con el cuidado, las conmina al espacio doméstico, dejando a los hombres las tareas de producción, que se desarrollan principalmente en el espacio público, espacio de poder y toma de decisiones. Esta dicotomía producción/reproducción, espacio público/privado, más bien doméstico, se ha considerado durante mucho tiempo como algo natural, determinado por la naturaleza; es decir, la biología estipulaba el lugar que por ser mujer o ser hombre se ocupa en la sociedad.

Los cambios socioculturales acecidos en las últimas décadas del siglo XX han limado en parte esta división de las tareas por sexo, no obstante, los roles de género siguen vigentes y ser mujer sigue siendo determinante para encontrar un empleo, para acceder a determinados trabajos o a puestos de alta dirección, a pesar de que actualmente las mujeres tienen igual o mayor formación que los hombres. No vamos a negar los profundos avances que han logrado las mujeres, pero aún queda una parte de la división sexual del trabajo que permanece y condiciona el desarrollo de niñas y niños e influye en la vida personal y profesional. El rol de cuidadoras, que tradicionalmente se les ha asignado, es uno de los más determinantes.

No es fácil eliminar un sistema que durante siglos nos ha oprimido, pues, como señala Pierre Bourdieu (2000)[2]. El sistema de dominación masculina se ha impuesto mediante la violencia simbólica, violencia amortiguada para las propias víctimas, que se ejerce esencialmente a través de los caminos puramente simbólicos de la comunicación y el conocimiento… del sentimiento.

Volviendo a Marcela Lagarde, para desmontar el machismo es necesario identificar a otras mujeres como semejantes, valorarlas como tales a partir del reconocimiento de la igualdad, la diferencia y la diversidad. Somos diferentes, tenemos experiencias vitales distintas, al tiempo compartirnos opresiones que debemos identificar. La sororidad es un principio universal de relación con todas las mujeres y es un recurso para enfrentar conflictos entre mujeres de formas inéditas, sólo con la eliminación de la misoginia. El patriarcado busca el enfrentamiento entre mujeres, cada mujer se compara competitivamente con ‘la otra’ y pondera como superior lo propio o lo de ‘la otra’ en un eje jerárquico de dominio-opresión y superior-inferior, mediado por la fobia clasista, racista, sexista, sectaria.

Como bien dice Lagarde, este enfrentamiento entre mujeres, ya sea por pertenencia a un partido político, a una institución, por la condición sexual, la religión, la etnia, etc., estimula la hostilidad y debilita la posición de las mujeres, que en definitiva compiten por ocupar una posición y tener acceso a los exiguos recursos que la sociedad les deja. La política patriarcal se sirve de las mujeres para dañar a las mujeres. Se convoca a las mujeres a ser insolidarias con las otras para ser aceptadas, valoradas o para ascender.

La sororidad busca el empoderamiento de las mujeres. Empoderarse implica aprender a aprovechar las oportunidades, los bienes, los recursos y los dones a favor de una misma y, si las mujeres se empoderan de manera colectiva, a favor de todas.

¿Seremos capaces?

[1] El feminismo en mi vida.

[2] La dominación masculina.

Read Full Post »

una-presentacion-muy-breve-de-la-historia-del-feminismo-1-638-2.jpgEstamos escuchando estos días declaraciones tan esperpénticas y trasnochadas que serían para reírse si el asunto no fuera tan serio, pues quienes dicen las barbaridades que veremos luego estarán, según todas las previsiones, en el Congreso de Diputadas y Diputados, es decir, tendrán voz y voto a la hora de legislar y eso no puede dejarnos indiferentes

Adolfo Suárez Illana, número dos del PP en las listas por Madrid ha declarado que en Nueva York se acaba de aprobar una ley por la cual se permite el aborto después del nacimiento, tamaña falsedad le descalifica sin más explicación. En NY se ha aprobado una ley que permite el aborto más allá de las 24 semanas en determinadas circunstancias. Ha dicho también que hay que ayudar a las mujeres que tienen que decidir si quieren ser madres de un niño vivo o muerto. Las mujeres, señor Suarez, tienen derecho a ser madres o no serlo, usted no tiene ningún derecho a opinar sobre lo que las mujeres queremos y hablar de un aborto como de ‘un niño muerto’, debería pensar en las madres que han perdido una hija o un hijo, cómo se sentirán al escucharle.

Parece que ese día estaba inspirado porque siguió diciendo, que me digan que se puede matar antes o después pues mire oiga los neandertales también lo usaban, lo que pasa es que esperaban a que naciera y entonces le cortaban la cabeza, hace pensar que el que no ha evolucionado es él, que se permite juzgar a las mujeres, que pretende volver a las cavernas de las historia…, en fin, si las diosas no lo remedian estará ocupando un escaño en el Parlamento.

Santiago Abascal, por su parte, quiere que se legalice el uso de armas y dar impunidad a quienes disparen contra personas que entren en su casa.  Aclaró que el uso de armas es para los ‘españoles de bien’. Debemos recordar que en la comunidad andaluza ha pedido que se identifique a las personas que impartieron formación en igualdad de género (volvemos a la caza de brujas del Medievo), también quiere derogar la Ley de Violencia de Género. El partido que lidera lleva como cabeza de lista a militares, toreros y personas que defienden valores caducos y claramente contrarios a los derechos de las mujeres.

Declaraciones de otros líderes de este partido de extrema derecha han tenido menos difusión pero no por ello son menos alarmantes. Rubén Manso, por ejemplo, aboga por ‘redefinir’ el Estado de Bienestar, por considerar que la educación o la sanidad no deben ser financiadas por el Estado.

El partido liderado por Albert Rivera, ahora Alberto Carlos, lleva en su programa legalizar los vientres de alquiler y la prostitución, dos propuestas que dejan claro que la explotación de las mujeres le tiene sin cuidado. Hablar de ‘libre elección’, ya lo hemos dicho otras veces, no es más que un subterfugio para legalizar negocios que se lucran a costa del sufrimiento de las mujeres.

De los dirigentes de los partidos de izquierda no vamos a hablar en este post porque no queremos contribuir a aumentar la poca credibilidad que para las mujeres feministas tienen algunas de sus propuestas. Es urgente que se definan en cuestiones básicas para los derechos de las mujeres y, más allá de las declaraciones de buenas intenciones, se posicionen con claridad sobre la prostitución, los vientres de alquiler, la trata o la pornografía. Piénsenlo bien y no pidan nuestro voto si las propuestas que llevan en sus programas siguen considerándonos como meros objetos para el placer masculino. No valen justificaciones, medias verdades, queremos medidas concretas para avanzar en un modelo de sociedad en el que todas y todos tengamos los mismos derechos. Aún están a tiempo,

Read Full Post »

 

“Vivimos en un mundo dominado por los hombres, y la vulnerabilidad de las mujeres a la violencia se debe a las múltiples formas en que las mantenemos en situación de desigualdad”

António Guterres, Secretario General de la ONU

 

Vivimos tiempos convulsos. Andalucía tendrá por primera vez un gobierno del PP y Cs y será gracias al apoyo de un partido de extrema derecha, que por primera vez desde el fin de la dictadura franquista, ha entrado en un parlamento. Este hecho no puede dejar indiferente a nadie y menos aún a las mujeres feministas, pues entre sus exigencias para apoyar la investidura se encuentran medidas que suponen un retroceso en los avances logrados con mucho esfuerzo.

49204733_2198531833538664_4325532001265254400_n

El 15 de enero, en la Puerta del Sol de Madrid, las pancartas dejaban claro que no se va a permitir que los derechos de las mujeres retrocedan.

50000109_2198618490196665_6352139777608777728_n

En los últimos años los partidos que van a gobernar la citada comunidad autónoma se han presentado como defensores de la igualdad de oportunidades de las mujeres y han apoyado medidas importantes para eliminar las violencias machistas, recordemos que firmaron el Pacto de Estado que se aprobó en el Parlamento en 2017 y se pusieron el lazo morado el #8M. Ante las declaraciones de los últimos días cabe preguntarse si creían de verdad lo que apoyaban o simplemente hacían lo que se consideraba ‘políticamente correcto’, dado el auge que el movimiento feminista había alcanzado no sólo en España, sino a nivel internacional.

A modo de ejemplo, en el caso del PP, no se pueden entender las declaraciones de Ruth Beitia o Isabel Díaz Ayuso, candidatas a presidir Cantabria o la Comunidad de Madrid. Decía la primera que  ‘se debe tratar igual a un animal, a un hombre o a una mujer si son maltratados’. Díaz Ayuso por su parte declaraba que ‘en los juzgados hay cierta indefensión de los hombres’ o que ‘todas las medidas que se pongan en marcha para prevenir y erradicar la violencia contra las mujeres y contra los hombres son bienvenidas’. Es más que evidente que poco saben sobre la violencia de género, que se olvidan de que a las mujeres las asesinan hombres por el hecho de ser mujeres, que no se puede ‘meter en el mismo saco’ las violencias estructurales que sufrimos las mujeres con las que puedan sufrir los hombres, que por cierto no están desamparados, le recuerdo a la señora Díaz que existe un código penal. Las declaraciones de Beitia mejor ni comentarlas.

Por su parte Ciudadanos, que dice no pactar con partidos de extrema derecha, va a gobernar con el PP gracias al apoyo de un partido claramente xenófobo, fascista y misógino. Que nos expliquen este galimatías, porque las ciudadanas y los ciudadanos de este país sabemos analizar lo que implica formar parte de un gobierno apoyado por la extrema derecha, que  quiere derogar la Ley de Memoria Histórica y la Ley de Violencia de Género, que quiere eliminar las ayudas a las mujeres que sufren o han sufrido violencias machistas, que quiere suspender el espacio Schengen y tomar medidas contra la inmigración que posibiliten la expulsión de muchas personas. Son algunos ejemplos que Ciudadanos, por mucho que lo intente, no puede explicar o pretender que no existen.

El feminismo ante estas circunstancias no se arredra y ha dado respuesta en las calles de toda España para decir que las feministas no vamos a permitir #NiUnPasoAtrás en los avances que tantos esfuerzos han costado a las mujeres, #LosDerechosNoSeNegocian. Las feministas no confundimos violencia machista con violencia doméstica, todas las mujeres sabemos que estamos en riesgo de ser abusadas sexualmente, de ser violadas, de ser acosadas por la calle, que se cuestione cómo vestimos o cómo nos comportamos. Sufrimos ser discriminadas en el trabajo por ser mujeres, cobramos menos realizando un trabajo similar al que realizan los hombres, nos cuesta que se reconozcan nuestros méritos y dedicamos una parte de nuestra vida a cuidar, como si fuera una obligación exclusiva de las mujeres. Los derechos adquiridos se respetan, no se negocian.

El último informe de ONU Mujeres señala que de los 87 millones de mujeres que fueron asesinadas en 2017, el 60% de los asesinos fueron novios, parejas, exparejas o familiares hombres. La violencia machista debe tener un trato diferencial del resto de la violencia, porque es consecuencia de las diferentes relaciones de poder que existe entre mujeres y hombres, quienes lo pongan en duda les aconsejo que lean el informe

 

Read Full Post »

41gwrnqpryl._sx343_bo1,204,203,200_Simone de Beauvoir nació el 9 de enero de 1908 en París. Su libro «El segundo sexo», publicado en 1949, en palabras de Teresa López Pardina, no sólo ha nutrido a todo el feminismo, sino que es el ensayo más importante de toda la centuria.

Hoy en el aniversario de su nacimiento debemos recordarla más que nunca y tener en cuenta sus enseñanzas. Vivimos tiempos revueltos en el plano político y mira tú por donde los derechos que más se atacan son los de las mujeres.

Ya lo dijo Simone de Beauvoir: No olvidéis nunca que bastará con una crisis económica, política o religiosa para que los derechos de las mujeres vuelvan a ser cuestionados. Esos derechos nunca se dan por adquiridos. Debéis permanecer vigilantes durante toda vuestra vida.

La ultraderecha va a entrar en un parlamento y es evidente que los avances logrados por el movimiento feminista les molestan. Leer la prensa estos días desazona e indigna, pero eso no va a parar a las mujeres, las feministas no vamos a permanecer calladas y no daremos un paso atrás. Desde El tren de la libertad, siguiendo con las movilizaciones del #7N y el #8M, el feminismo ha demostrado que su fuerza es imparable.

Son muchas las frases de Simone de Beauvoir que debemos recordar, hoy dejo dos que siempre he considerado fundamentales.

simone de beauvoir

frase-no-se-nace-mujer-llega-una-a-serlo-ningun-destino-biologico-fisico-o-economico-define-la-simone-de-beauvoir-102913

Las mujeres feministas lo tenemos claro, #NiUnPasoAtrás

 

 

 

 

 

 

 

Read Full Post »

5aa8560479efe..0-68-684-421Finalizamos un año con la satisfacción de ver que el movimiento feminista, hace unos años denostado y olvidado, está en la agenda mediática, política y social. Si hace apenas unos años definirse como feminista comportaba un cierto ‘riesgo’ de que se te mirara mal, en estos momentos hemos pasado al otro extremo, parece  que todas y todos somos feministas. Aun reconociendo lo mucho que se ha avanzado, pensar que una mayoría de la población es feminista no tiene mucho fundamento, si así fuera las desigualdades que sufren las mujeres no existirían.

Recordamos con emoción las movilizaciones del 8 de marzo, el morado era el color de las calles de muchas ciudades y desde entonces otras muchas movilizaciones han demostrado que el movimiento feminista no se va a callar, que seguimos adelante. 

La publicación de mi libro Caminado hacia la igualdad, un proyecto profesional, personal y político, coincidió con la celebración en Madrid del congreso GOBIERNO CORPORATIVO E IGUALDAD DE GÉNERO. Realidad y tendencias regulatorias actuales. El hecho de que el libro comenzara su andadura en este espacio de la mano de una mujer a la que admiro, Katharina Miller, fue una gran satisfacción personal.

En el citado congreso se analizó la situación de las mujeres en el ámbito judicial, en los órganos de dirección de las empresas, en la tecnología, en las finanzas, etc. También  se planteó cómo habían influido en otros países la imposición de cuotas para avanzar en la representación paritaria de mujeres en puestos de dirección. Las ponentes eran mujeres de un gran nivel profesional y comprometidas con la igualdad de oportunidades.

Algunos de los aspectos que se presentaron eran poco conocidos para mí, por ejemplo las altas finanzas me quedan muy lejos o la visión de una consejera delgada de una empresa que cotiza en bolsa, se aleja y mucho de mi trabajo cotidiano y de mi activismo feminista. Me muevo en un ámbito muy diferente al que pertenecían las profesionales que en el congreso analizaron  las políticas de igualdad en diversos países. Escucharlas me hizo pensar que, incluso teniendo interés comunes, como son reivindicar la igualdad de oportunidades para las mujeres o lograr la paridad, no parece que haya espacios de encuentro entre esas mujeres que desarrollan su trabajo a un alto nivel profesional y las que trabajamos más a ‘pie de calle’.

Como bien sabemos todo es relativo y a menudo nuestras perspectivas y formas de ver las cosas cambian en función de las circunstancias que vivimos. Unos días antes de asistir a dicho congreso participé en una jornada organizada por la Red Navarra contra la Pobreza y la Exclusión Social y tuve una experiencia similar pero al contrario. Me explico, intervine en la jornada como experta en igualdad de género analizando la situación actual y proponiendo políticas para avanzar en un modelo de sociedad diferente. En la mesa de debate que siguió participaron mujeres que trabajan en intervención con mujeres sin hogar, migrantes, familias monomarentales o mujeres con patología dual. Al escucharlas sentí que mi planteamiento había sido un poco teórico comparado con la realidad que ellas relataban. Vaya que si unos días antes me había sentido poco o nada teórica, en ese momento mi percepción cambio debido a las circunstancias y a las mujeres con las que compartí ese espacio de debate.

Cuento esto porque cada día soy más consciente de que las mujeres feministas, las mujeres que trabajamos por un cambio de sociedad, lo hacemos desde perspectivas diferentes y desde ámbitos diversos y si aunáramos esfuerzos el cambio sería más factible. Todas queremos que las mujeres dejemos de ser discriminada por el hecho de ser mujeres, denunciamos las violencias machistas, los abusos sexuales, la falta de mujeres en puestos de dirección en los partidos políticos, en los sindicatos, en las empresas, en las universidades, en el deporte, en la ciencia o en el cine. Sin embargo, muchas veces no conseguimos buscar puntos de encuentro para colaborar.

Cada una centramos nuestro esfuerzo en el ámbito de actividad que nos ha tocado vivir y actuamos como si los objetivos que perseguimos fueran los más importantes y como si los diferentes escenarios de discriminación de las mujeres fueran espacios estancos, que no tienen nada que ver entre sí, cuando la realidad es muy diferente. Juntas lograremos eliminar el sistema de dominación patriarcal.  

Read Full Post »

En este vídeo explico los temas que analizo en mi libro: Caminando hacia la igualdad. Un proceso profesional, personal y político, que se publicará en unos días.

El libro debe mucho a quienes durante estos diez años habéis visitado el blog. Ver que cada día más personas leían lo que publicaba, me animó a seleccionar algunos de los temas que he ido analizando para evaluar los avances que se han producido.

Analizar las políticas de igualdad ha sido una constante a lo largo de estos años, porque no lo olvidemos, sin cambios estructurales las desigualdades se perpetúan.

Desde aquí os iré informando, fecha de presentación, dónde podéis adquirirlo y cualquier novedad que surja. Gracias a quienes me habéis acompañado a lo largo de estos años.

 

 

 

 

 

 

Read Full Post »

eL LARGO CAMINO HACIA LA IGUALDADEs indudable que algo está cambiando en nuestra sociedad. Hemos visto que el movimiento feminista consiguió movilizar a miles de mujeres, que logró que en muchas ciudades el 8 de marzo el color morado inundara las calles, los mercados… Fueron muchas las mujeres que se unieron para reclamar ser ciudadanas de pleno derecho.

Las masivas manifestaciones del 8 de marzo pusieron de manifiesto que las mujeres no se resignan a ser discriminadas en el mercado laboral, a ser minusvaloradas e invisibilizadas en el día a día, a ser relegadas al espacio doméstico y de cuidados, a ser consideradas meros objetos en la publicidad, a sufrir todo tipo de violencias por el hecho de ser mujeres. Por ello, exigieron el fin de la discriminación laboral y salarial, reclamaron cambios legislativos para eliminar el rol de cuidadoras que aún pesa sobre las mujeres, exigieron medidas reales contras las violencias machistas, en definitiva, reclamaron un modelo de sociedad en el que la igualdad sea real.

El cambio que vimos el 8 de marzo lo refleja la encuesta de Demoscopia para ‘El Mundo’. La discriminación de género es vista como un problema por una amplia mayoría de la sociedad. Más del 75% de las personas  encuestadas  consideran que las mujeres sufren discriminación de género en el acceso a los puestos de dirección, tanto política como económica, en el salario o en las condiciones para compatibilizar trabajo remunerado y familia.

Que una amplia mayoría de la sociedad sea consciente de la discriminación de género es sin duda importante, pero llama la atención que aun siendo conscientes de este hecho y de señalar que en España las administraciones toman pocas medidas para favorecer la igualdad, sólo el 36,6% considera necesario penalizar a las empresas que no promuevan la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres.

A este respecto conviene recordar que las administraciones tienen la obligación de garantizar la igualdad de género. Veamos, la Constitución señala:

Art. 9.2. ‘Corresponde a los poderes públicos promover las condiciones para que la libertad y la igualdad del individuo y de los grupos en que se integra sean reales y efectivas; remover los obstáculos que impidan o dificulten su plenitud y facilitar la participación de todos los ciudadanos en la vida política, económica, cultural y social.

Art. 14. ‘Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social’.

La «Ley orgánica 3/2007, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres«, incorpora al ordenamiento jurídico español dos directivas. La Directiva 2002/73/CE, que se refiere a la aplicación del principio de igualdad de trato entre hombres y mujeres en cuanto al acceso al empleo, a la formación y a la promoción de profesionales, en condiciones iguales;  la  Directiva 76/207/CEE, el principio de igualdad de trato entre hombres y mujeres al acceso a bienes y servicios y su suministros.

El Art. 11.1 dice: ‘Con el fin de hacer efectivo el derecho constitucional de la igualdad, los Poderes Públicos adoptarán medidas específicas en favor de las mujeres para corregir situaciones patentes de desigualdad de hecho respecto de los hombres. Tales medidas, que serán aplicables en tanto subsistan dichas situaciones, habrán de ser razonables y proporcionadas en relación con el objetivo perseguido en cada caso’.

Está claro que cuando se discrimina a las mujeres, cuando se las penaliza en el mercado laboral por razón de su género, se está incumpliendo la legislación vigente. ¿Por qué se teme penalizar a las empresas que no cumplan la ley? ¿Por qué tanta permisividad ante una clara vulneración de la legislación vigente cuando se trata de la igualdad de género?

En la citada Ley de Igualdad, incluso se contempla la posibilidad de adoptar medidas para corregir las desigualdades existentes, las acciones positivas. Se habla de las ‘mujeres cuota’ como si fuera una práctica habitual la implantación de acciones positivas, cuando la realidad es que raramente se aplican. Sin embargo, poco se comenta que las cuotas son una realidad, pero para los hombres. Ser hombre es una garantía para acceder a un puesto, con independencia de sus valía;  por el contrario una mujer tiene que demostrarla. ¿Por qué no se habla de los ‘hombres cuota’?

 

 

Read Full Post »

Este 8 de marzo va a ser muy especial, pues mujeres de todo el mundo convocan una huelga feminista, una huelga laboral, estudiantil, de consumo y de cuidados.

8MHuelgaFeminista

La huelga feminista ha molestado mucho al gobierno, hasta el punto de que ha elaborado un argumentario para sus dirigentes que no tiene desperdicio. Dice el PP que no secundan la huelga porque ‘apuesta por el enfrentamiento entre mujeres y hombres’. Sería de desear que el presidente y sus ministras/os se documentaran un poco antes de opinar. Deben recordar, o en su caso aprender, que el feminismo, es un movimiento social y político, que busca eliminar la opresión que sufren las mujeres. Por ello trabaja para alcanzar una sociedad más justa e igualitaria, para que la opresión que sufren las mujeres desaparezca.

Ya ve, señor Rajoy, queremos un nuevo modelo de sociedad, porque la sociedad occidental que su partido teme que desaparezca, permite que cada día muchas mujeres sufran discriminación en el empleo, sufran acoso sexual y violaciones o sean asesinadas sin que el gobierno se moleste siquiera en recordar sus nombres. Es una sociedad que no se inmuta ante las cifras de niñas y niños que sufren desnutrición, porque viven en familias monomarentales con recursos limitados. Una sociedad en la que las personas mayores sin recursos viven situaciones dramáticas de desatención, pero claro, dedicar recursos a la dependencia no es cosa suya, como no lo es la brecha salarial, los desahucios, la deficiente atención hospitalaria por la falta de recursos, etc.

Cuando escucho que no secundan la huelga feminista porque es elitista, pienso que su insensatez no tiene medida. Las mujeres que secunden la huelga del #8M, según esa idea, serán mujeres de clases altas, que pueden permitirse sin problema perder el salario de un día o de unas horas. Significará que todas las mujeres que ese día quieran asistir a una manifestación y no puedan hacerlo porque tienen que cuidar a niñas y niños, a personas mayores y dependientes, son personas con un alto poder adquisitivo, que como mucho harían huelga a la japonesa, como ha declarado la ministra Isabel García Tejerina. Da vergüenza escuchar a una ministra decir tamaña desfachatez. Decir que la huelga es insolidaria porque no la pueden seguir las personas desempleadas raya en el esperpento.

No se quedan atrás en sus absurdas declaraciones las mujeres y los hombres de Ciudadanos. Dice Ines Arrimadas que no apoyan la huelga feminista porque va contra el capitalismo, que se reivindican cuestiones ideológicas. Por supuesto que trabajar por la igualdad de mujeres tiene ideología, el sistema capitalista es el aliado del patriarcado para someter a las mujeres, para que sigan siendo ciudadanas de segunda. Patricia Reyes, dice que es un huelga comunista y que ‘algunas son feministas pero no comunistas’, mejor ni comentar. Por su parte Albert Rivera declara que respeta la huelga (faltaría más) pero no la secunda, porque ‘menos ruido y más trabajo para las mujeres’. Las mujeres, señor Rivera, trabajamos muchas horas, muchas de ellas no remuneradas y vamos a salir a las calles y haremos mucho ruido para que se entere que exigimos igualdad en el empleo, en el salario, en los cuidados, etc.

Margarita Robles ha declarado que secundarán los paros de dos horas que convocan CCOO y UGT, pero no la huelga feminista. Escuchar que el PSOE no secundará la huelga feminista produce tristeza. Añaden que apoyan toda manifestación que visibilice la desigualdad de la mujer. Faltaría más que también estuvieran en contra de que las mujeres salgamos a la calle un #8M.

Afortunadamente, Podemos e Izquierda Unida si secundan la huelga feminista y hay sindicatos que también la apoyan, lo que permitirá que las mujeres que deseen hacer huelga laboral puedan hacerlo: CNT, CGT, Confederación Intersindical, entre otros.

No será fácil para muchas mujeres secundar la huelga debido a la situación de precariedad que sufren en el mercado laboral, pero sin duda será una fecha clave para el feminismo y, pese a quien pese, marcará un antes y un después en la lucha por la igualdad entre mujeres y hombres.

La huelga de cuidados, la más complicada de seguir, es la más importante. Las mujeres cuidan a diario de niñas y niños, de personas mayores y dependientes, lo que supone que para muchas sea un problema secundar la huelga y como se viene señalando desde diversos ámbitos, ahí es donde los hombres que quieran apoyar esta huelga de mujeres pueden tener un importante papel, cuidando de quienes tengan cerca. Pueden ser personas de su propia familia, pueden apoyar a esa vecina que raramente puede salir de casa porque cuida de personas mayores. Deben callar ese día y dejar que la voz de las mujeres se escuche en los medios de comunicación, en la calle… y que en el #8M los hombres por una vez se mantengan en segundo plano.

28166325_419844865095277_2652349767262845677_n

 

Read Full Post »

Ya pasaron los premios Goya, una gala aburrida y machista donde las haya y eso que se publicitaba como ‘los Goya feministas’. Nada más lejos de la realidad lo que pudimos ver esa noche. En principio, porque dudo mucho que una gala de estas características se pueda denominar como «feminista», podemos decir que fue más o menos reivindicativa, pero feminista me cuesta verlo.

#MASMUJERES

#Goya2018

Las mujeres y los hombres desfilaron con sus mejores galas, ellas vestidas de diseño, ellos de smoking o vestimentas similares. Pero de lo que se habla y mucho es de cómo visten las mujeres en estos eventos y se analiza hasta el más mínimo detalle, lo que no sucede con los hombres, ellos parece que van a trabajar de smoking todos los días. Pero está claro que dedican tiempo y dinero a decidir que ponerse. La diferencia es que de ellos no se habla. Primera discriminación.

El evento fue presentado por dos hombres, ninguna novedad, es lo que habitualmente sucede, pero que fueran mal hablados fue pasarse de la raya, que utilizaran un ‘lenguaje coloquial’ machista y pretendieran hacer concesiones a la galería con alguna sandez pretendidamente feminista, no tiene justificación. Llama la atención, o no…, la insistencia de los hombres hablando de sus genitales para hacerse los simpáticos, cuando en realidad se les ve como niños grandes llamando la atención. Segunda discriminación.

La ausencia de mujeres protagonistas durante la gala fue más que evidente. Los datos se pueden leer en cualquier artículo de los muchos que se han escrito sobre la entrega de premios, lo que si vimos fue a mujeres que entregaban premios, pocas los recibieron; normal si no estaban nominadas, se puede alegar, además es lógico que sean menos las nominadas puesto que ellas tienen menos posibilidades de dirigir, producir, escribir guiones, etc. No podía ser de otra manera.  Vamos por la tercera discriminación.

La gala de los Goya 2018 estaba precedida por la compaña #MÁSMUJERES promovida por la asociación CIMA,  Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales.

#MASMUJERES en guion y dirección, desde donde surgen las historias que luchan contra los estereotipos.

#MASMUJERES en los cargos de responsabilidad, equilibrando la estructura de nuestro cine. #MASMUJERES jefas de equipo en los puestos técnicos que rompan definitivamente con el cliché de la especialización.

#MASMUJERES que aporten la necesaria mirada femenina al mundo que compartimos.

#MASMUJERES

#Goya2018

Se vieron abanicos rojos, símbolo de la campaña, y discursos apoyando la reivindicación. A destacar el de Pepa Charro, la Terremoto de Alcorcón que, con datos, denunció la realidad del cine español. Es decir, la invisibilidad de las mujeres en las tareas que se consideran ‘cosa de hombres’. Para ellas quedan las tareas ‘propias de su sexo’. Leticia Dolera dijo: «Nosotras somos la mitad del mundo» y  respondió Paula Ortíz: «Y la mitad de la imaginación». Ellas entregaron el premio a Carla Simón por su estupenda película ‘Verano de 1993’. Las tres celebraron el premio.

La vicepresidenta de la Academia, Nora Navas, recordó a la presidenta, Yvonne Blake, que estaba hospitalizada, con estas palabras: “La mayoría de la gente recuerda un premio Oscar cuando lo gana un actor. Pero muy pocos conocen el que ganó Yvonne Blake por vestir a los personajes que tanto nos emocionaron».

Dijo también “Porque derrotando la superioridad de género derrotaremos el monstruo de la violencia contra las mujeres. Y debemos lograrlo todos juntos. Todas, juntas”. “Desde hoy y para siempre la Academia de Cine va a ser una referencia en términos de igualdad, respeto y oportunidad. Queremos transmitir a esos y esas adolescentes que hoy van al cine y sueñan con dedicarse a este oficio que no hay límites. Y que no basta con ponerse delante de una cámara. Que también necesitamos directoras, montadoras, guionistas, sonidistas, directoras de fotografía, scripts, compositoras… en igualdad de número que los hombres”. Esperemos que sea cierto.

Hay que decir que se hicieron críticas a la campaña dentro y fuera de la alfombra roja, mejor no mencionarlas, porque casi todas fueron hechas por hombres y suena a que buscaban protagonismo, o sea, que la mejor manera de chafarles es ignorar  sus palabras.

Hubo mujeres que no mencionaron la campaña durante su intervención en la gala, no sabemos sus motivos, por ello no entiendo que se haya criticado su decisión, por hombres claro. Cada persona decide el momento y el lugar de hacer pública su postura, puede ser durante la gala o puede decidir otro espacio y lugar. No pronunciarse en ese momento puede deberse a mil razones. Por ello criticar lo que hacen las mujeres, culpabilizarlas por su actitud, supone una vez más, marcar las pautas que las mujeres deben seguir, decir qué deben hacer, en qué momento hacerlo y, ya puestos, hasta pueden dictar su discurso.

#MASMUJERES

#Goya2018

Finalizo felicitando a Isabel Coixet, que una vez más recibió el premio a la mejor directora por su película «La librería», que también recibió el premio a la mejor película y al mejor guión adaptado. Una buena película.

 

 

Read Full Post »

Older Posts »